viernes, 19 de junio de 2009

Desfile nocturno


La noche hace de mi, un ser inexorable
Me pinta, corta o destruye
Me hace de nido, piedra o lapida
Y yo me muevo en el vaivén de su silencio
De puntillas, descalza o de rodillas
Creo sentir el amor fraterno,
Ese amor que nace en el crepúsculo
Y me abandona al trazarse amarillo
La vida del siervo

La noche, me vierte en la esencia
En aquel infinito rebosante,
Aquella existencia perpetua del hombre suprimido
Y yo la sigo con los ojos cerrados,
Bloqueada por nubes de polvo ficticias.
Soy sólo una onda perdida en el radar,
Que fluye al compás de la virginidad incipiente

La vida se congela en la noche,
Ánimas desnudas repiten su repertorio
Planes monótonos sin lógica,
Pues lo ilógico es el pilar de este mundo
1,2, 3,4
El desfile fantasmal ha dado inicio
Y yo sólo un rehén envuelto en sus alas de fierro

Grano por grano,
El reloj de arena se va a acabando
Ha florecido ya el capullo,
El esteriotipo del hombre humano definido

Calcetin con rombos man

miércoles, 17 de junio de 2009

No puedo más.

Busqué en tus cenizas, signo de vida
Las junte y quemé de nuevo,
Las deshice y rehice a mi modo,
Un latir desnudo en mi presencia


Ciertas veces creo sentir que algo viene y se va, es un sentimiento falaz redundante que vuela pero no aterriza, intento plasmarte en el papel te creo, modifico y elimino pero nada convence, nada convence ni existe y únicamente, vivo de bocetos.

Si la iluminación es tan divina como dice ser, que se aparezca de una vez en mi puerta, el frío y el hambre me va matando y no hay nada que satisfaga o sacie mi alma.

Vaya alma, vaya alma, vaya alma vacía ante tí.

Lléname, colmame de alguien, de algo.

No quiero simplemente ser un maniqui.

...

Siempre traías sueños bajo el brazo, como fajos de períodicos añejos e inservibles.


Te miraba y me reía burlonamente en tu cara, me encargaba de romper tu mundo en mil y un fragmentos y te abandonaba en la búsqueda de los vestigios de una ilusión, tu movías una ficha y yo en vano movía otra, te cortaba la jugada, te cortaba cada salida inesperada de vivir.


Nunca escapabas, solo mirabas como un niño aturdido y te refugiabas en mis brazos, yo te daba calor, ese calor que quien sabe como o porque nos unía uno al otro, sin dejarnos desistir.

lunes, 15 de junio de 2009

Grietas en mármol puro




Grietas en mármol puro,
Se abren al sonar tu voz
Rompes esquemas, creas otros tantos
Y te pierdes digno en el juego de Dios
Corres y armas todo a tu gusto,
Hileras de sueños sin don ni son
La plebe te mira atónita, obstinada
¿Quién eres tú, sino yo?

domingo, 14 de junio de 2009

Toc toc? Abrete sesamo.



El frío invierno ha helado mi corazón, unos dicen que es de piedra y otros de mármol y yo lamentablemente ya no sé ni de que estoy hecha.

Al fin y al cabo, ¿todos somos iguales no?

Todos jugamos al mismo teatro, al mismo papel... somos marionetas, simples títeres amarrados a decretos, tradiciones, lenguas y culturas.

¿Y quién se queja? Quién grita ¡YO! ¿Yo quiero ser diferente?
Disculpame, tú no quieres ser nadie...

Te cortan las alas para volar, te encarcelan en prisiones y te amarran con cadenas.

Creo sentir un latir en mi corazón, falsa alarma, era solo una grieta en el hielo gimiendo salir.

Al tocar otoño mi puerta.


Hojas de otoño que caen imprecisas,
Sobre estas mis faldas desnudas
Yo busco en tu amor, mi medicina
Y tú en cambio en mí, un par de monedas

Mugrientas monedas forman al mundo,
Yo soy un títere más en tu espectáculo
A cada palabra yo me muevo y en vano,
Lucho por no ser el peón de tu vida

Mil y un te quiero salen de tu boca,
Me usas, arrastras y amarras a tu destino
Soy un ser insuficiente en tus brazos
No soy nadie dentro o fuera de ti.

Yo anhelo ser alguien,
No aterrizar jamás en mi eterno vuelo
Alcanzar mis sueños como nubes al cielo
Tener una identidad clara y definida

El amor se desborda del fulgor de mis labios
Te daría el mundo entero en una sola nota,
Te daría todo lo que no tengo,
¡Miseria, hazme hombre!

Hojas de otoño que caen imprecisas,
Imprégnenme de su esencia marchita
Quiero sentir que es ser humano,
El impacto al caer la moneda cruje en mis oídos.

Las cuerdas de mi guitarra

La guitarra ha perdido sus cuerdas,
Ahora juega a la guerra como niños al ajedrez,
Con estrategias y sistemas económicos
¿Quién ganó el Monopolio?
Billetes rojos, azules o verdes
Monedas de sabores y chispas de chocolate
Y en mi mano un trozo de pan
Que clama ser repartido

Tantas cosas quisiera ser.


Aquí no se respira, aquí no hay aire puro.


Afuera el sol emerge y esparce sus rayos fulgurantes pero yo estoy aquí sentada, llena de frío y me pierdo una y otra vez en memorias baldías. Mi alma esta helada, soy un trozo de iceberg intentando salir a la superficie.

¿Soy algo o no soy nada?

No tengo sed ni hambre, ni vestigios de deseos inoportunos.

Pero en cada melodía, creo oírte… tu sonido traspasa mi ser, ¿El tiempo perdona?

El tiempo es eterno mas sin embargo, nunca da marcha atrás.

El reloj de arena va cumpliendo su ciclo y cada gramo roza mi piel, dejando anclada una huella firme y persistente.
Y sigo aqui, los rayos de luz se aíslan de mí intentan tocarme pero no pueden... ni nunca podrán.
Soy un ser de piedra que en lo más fondo de su alma ruega poder algún día salir a la superficie y quien sabe.

¿Derretirme como los demás?

Tan solo agua y polvo.


Un día nuevo empezó, una página menos en el calendario.

Un típico día verano, el calor sofocante fluye y no encuentra espacios vacíos.

Y sí, la playa está a varios kilómetros de aquí y yo no corro ni vuelo.

Por lo que, he aquí mis únicos recursos: Un vaso de agua que hace las veces de playa y un poco de polvo que finge ser arena.


¿Ven lo que un poco de imaginación puede hacer?

Jaja, a veces huimos de nuestra realidad,
Donde no hay
MUERTE ni DESTRUCCIÓN ni MISERIA o HAMBRE.
Donde sólo hay arco iris y conejitos de pascua repartiendo chocolates.

Si, volamos por los aires con peso de pluma,
Pero... siempre hay un momento en el que hay que aterrizar.


Afrontar el día a día no es fácil, pero tampoco imposible.

El vaso de agua se acabó, el calor sofocante ha regresado.

Mi curita...


Siempre que me hago una herida, una brecha nueva en la piel surge la típica frase:

"Comprate un curita, eso lo arregla todo"

De colores, de tamaños, con dibujos o sin ellos y quien sabe talvez de sabores la curita, si aquella tira que nos ha acompañado durante nuestra infancia en cada golpe, caída y circunstancia es una leyenda.

Nunca lo arregla pero siempre hace un intento. Es una capa sobre la piel, una excusa para esconder nuestros sentimientos mas sin embargo abajo de todo... abajo de cada escudo está nuestra carne viva. Esa, que tarde y temprano pese a todas las máscaras y excusas puestas en nuestro camino hará su aparición y vaya que será un bestseller.